Sus ganas de descubrir el mundo merecían un masaje que imagine un viaje mágico. Lleno de olores y nuevas sensaciones, el momento es único y la aventura asegurada. Una explosión de cítricos (naranja, limón, petitegrain y pomelo) se mezcla con la suavidad y serenidad de la lavanda y el aceite de almendras. ¡Vitalidad y relax para los más pequeños y mimados de la casa!
